“El presupuesto es el fiel reflejo de las prioridades que tiene un gobierno. En el último año, el presupuesto general de Tucumán subió un 38%. ¿Qué pasó con Educación? Sólo se incrementó un 17%. Es decir que el gobierno decidió desfinanciar la educación en la provincia”, escribió el legislador José Ricardo Ascárate en un informe que envió a LA GACETA y que también publicó en Twitter.
“El recorte se produce principalmente en las direcciones de educación inicial, primaria, secundaria, técnica, jóvenes adultos, terciaria y educación especial. El Gobierno ajusta en la educación pública, mientras que el gasto en educación privada sigue la pauta inflacionaria”, dice.
“Esto acarrea un problema que puede traer consecuencias fatales para una generación entera”.
“Al recorte en las partidas educativas tenemos que agregar el desfinanciamiento total para el mantenimiento de más de 1.600 establecimientos escolares”, afirma. Sin embargo, consigna que el presupuesto de la Dirección de Asistencia Pedagógica no sólo recibió un aumento del 67% sino que se duplicó respecto al año anterior, pasó de $200 a $438 millones”.